¿Qué es el Método Ballester?

Es un método de aprendizaje fácil, práctico y útil que garantiza resultados desde el primer día de su aplicación.

  • Reduce y evita problemas disciplinarios.
  • Descarga el trabajo del docente o del educador.
  • Soluciona la heterogeneidad en el aula.
  • Optimiza el rendimiento académico con notables resultados.

El Método Ballester es como un paraguas que incluye los factores más relevantes en la educación en el aula según los expertos: el trabajo abierto (María Jesús Castro), la motivación (Elsa Punset y Rosabel Rodríguez), el medio (César Bona y Heike Freire), el trabajo en equipo (Pere Pujolàs), la creatividad (Ken Robinson y David de Prado), el mapa conceptual (Joseph D. Novak), la inclusión (Coral Elizondo) y la adaptación curricular (Jesús Garrido y Rafael Santana). El Método Ballester hace que los profesores disfruten de enseñar y los alumnos de aprender.

Es un método innovador que se basa en la participación activa del alumnado en el aprendizaje. El profesorado que lo aplica potencia intencionadamente las variables clave que hacen que los niños y jóvenes aprendan. Como resultado aumenta la motivación del alumnado, ahorra energía al profesorado y mejora el rendimiento académico con más del 90-97% de aprobados. Además, se evitan los problemas de disciplina, se reducen las sanciones de manera muy notoria y se previene el acoso escolar.

El alumnado es el centro del proceso de aprendizaje que, guiado por el profesorado, trabaja en equipo de manera activa, abierta y creativa, relacionando los conceptos mediante el mapa conceptual de Novak con la vida real fuera del aula. Se han realizado múltiples pruebas empíricas que avalan los resultados; el Método Ballester se ha aplicado en España, México, Colombia, Bolivia y Argentina, entre otros países, con notables resultados.

El método se usa en todas las materias y niveles educativos a partir de los tres años de edad. Todo esto se describe en el libro Método Ballester. El aprendizaje significativo en la práctica. (Ballester, 2018). www.metodoballester.com

¿Cuándo podemos decir que una metodología es buena?

Una metodología en el aula es buena cuando:

1.- Está fundamentada en una teoría.

2.- Hay múltiples pruebas empíricas que demuestran sus buenos resultados.

3.- Las personas que son contrarias a esta metodología no publican en contra.

4.- Cuando se aplica en la práctica funciona.

El método Ballester está basado en la teoría de Aprendizaje significativo de Ausubel descrito por Joseph D. Novak. (Ausubel, Novak y Hanesian 1978, Novak y Gowin, 1988).

Los resultados de rendimiento académico del aprendizaje significativo y los mapas conceptuales están demostrados por Novak y Gowin (1988), Moreira (1997), González (1996), Ballester (1999), González, F. M., Ibañez, F., Casalí, J., López, J., y Novak, J. (2000), Valadares J. y Soares, M.T. (2008) y por cientos de investigadores que han participado en los 8 Congresos Internacionales de mapas conceptuales y en los 5 Encuentros internacionales de Aprendizaje significativo.

Desde el año 2002, cuando se publicó la base del Método Ballester de aprendizaje, es decir, en los últimos 17 años y hasta el día de hoy, nadie ha publicado en contra.

Los testimonios que se adjuntan a continuación, además de múltiples evidencias como la reducción de problemas disciplinarios y la mejora del rendimiento académico, demuestran que cuando se aplica en el aula funciona.

Las prioridades del Método Ballester

Hemos considerado como base los resultados obtenidos en la investigación, que aquí plasmamos en un método educativo para llevar estas variables al aula. De cada una de las variables presentamos en el libro del Método Ballester (2018) un módulo para llevarlo a la práctica.

Las variables para hacer el aprendizaje significativo son:

El trabajo abierto: para poder trabajar con alumnos diferentes.

La motivación: para mejorar el clima del aula y tener al alumnado interesado en el trabajo.

El medio: para relacionarlo con el entorno.

La creatividad: para potenciar la imaginación y la inteligencia.

El mapa conceptual: para relacionar y conectar los conceptos.

La adaptación curricular: para el alumnado de necesidades específicas.

¿Qué dicen los profesores?

El profesorado dice:

«La metodología del profesor Antoni Ballester ha resultado fantástica para mis clases, para la enseñanza y el aprendizaje, he observado en mis alumnos un gran cambio, les he visto motivados para participar y su rendimiento ha ido en aumento, el uso de esta estrategia no se ha quedado solo en mi clase sino que ha rebasado fronteras».

Iovanna Rodríguez, profesora del Instituto Politécnico Nacional de México.

«Con el seminario yo he pasado de tener unas 50 amonestaciones al principio que tenía tantos problemas a no tener, poner una o cero y del 30 % de suspensos en junio al 95-97% de aprobados. Tanto el aprendizaje como el rendimiento de los alumnos está garantizado, los niños lo valoran positivamente y te lo comunican directamente y tú tienes mucha más satisfacción».

Gabriel Pereiro, profesor del IES Son Rullán de Palma de Mallorca.

«El libro del método Ballester se ha convertido en nuestra Biblia, el alumnado aprende solo, requiere un esfuerzo mínimo al profesorado, el clima del aula se modifica porque son aulas vivas, creativas, iluminadas, la palabra es viva, es un método que funciona muy bien».

Edelweiss Monreal. Directora del Colegio Público Buzanada de Tenerife.

«Lo que da coherencia y consistencia al Método Ballester y a toda esta teoría es que está validada por más de 35 años de experiencia, investigación y aplicación con docencia directa en el aula del profesor Ballester y sus colaboradores; los resultados están garantizados porque cuando se aplica el primer módulo del trabajo abierto, la clase mejora desde el primer día, y cuando se lleva a la práctica en el aula, funciona».

Santiago Vicente. Profesor de la Universidad de Valencia.

¿Qué dicen los alumnos?

El alumnado dice:

«Me gusta mucho porque después no se me olvida lo que estudio».

«La verdad es que las clases me han parecido muy bien, ya que hemos trabajado casi siempre en equipo, de esta forma también se aprende mucho, una de las cosas que me han sido más útiles ha sido hacer mapas conceptuales, ya que no sabía hacerlos muy bien, y otra de las cosas, como en los exámenes, aprender a redactar todo aquello que sabía, y antes no era muy capaz de expresarlo».

«Las clases de este curso me han gustado mucho sobre todo en dos aspectos: hemos trabajado mucho en grupo, lo que mejora tanto nuestro rendimiento como la convivencia entre nosotros y he aprendido a hacer mapas conceptuales y a usarlos y creo que pueden ser de gran ayuda aunque los exámenes me han parecido demasiado largos, a veces no daba tiempo a acabarlos aunque se supiera el contenido. En general mi valoración de las clases es muy buena».

«A mí sinceramente me han gustado mucho las clases, ya que hemos aprendido mucho sin agobiarnos tanto. Hacer los trabajos en cartulinas y cambiando de pareja también me ha parecido muy buena idea, ahora conozco mejor a todos mis compañeros y sería capaz de hacer una pequeña descripción de cada uno, y eso antes no podía. También el tema de buscar información en internet es muy buena idea porque realmente he aprendido mucho, ahora siempre leo los textos que busco y elaboro con las fotos viendo si son adecuadas o no».

Los niños ya están trabajando

En el momento en que vamos a publicar este artículo en el blog recibimos la llamada de un profesor que aplica el método Ballester; nos dice que llega a las clases y se encuentra a los niños que ya han cogido el material y ya están trabajando».

Como dijo María Montessori «La mayor señal de éxito de un profesor es poder decir: ahora los niños trabajan como si yo no existiera».